¿Porque caminar mejora la circulación venosa?
La contracción muscular del muslo, pero sobre todo de la pierna, tiene un efecto preponderante en el retorno venoso.
El músculo, al encontrarse envuelto por la aponeurosis inextensible durante la contracción, ejerce una presión externa sobre las venas, las comprime y produce cambios dinámicos que impulsan la sangre hacia la aurícula derecha, ayudado por la conformación y orientación del sistema valvular.
Este mecanismo, denominado “bomba venosa”, actúa durante la marcha y lo hace de manera fundamental sobre el sistema venoso profundo e influencia en forma indirecta (succión) al sistema venoso superficial.
Esto explica por qué la contracción muscular de las extremidades facilita el retorno venoso hacia el corazón y disminuye la presión venosa.
Durante la relajación muscular cesa la presión ejercida sobre las venas profundas, que se vacían y quedan disponibles para ser rellenadas desde el sistema venoso superficial.